El hotel, ubicado en uno de los distritos históricos mejor conservados de la antigua capital de Japón, evoca el ambiente de un alojamiento nipón por excelencia: un oasis tranquilo en una ladera de Higashiyama en perfecta armonía con los templos y jardines espirituales de los alrededores.
Además de las vistas panorámicas de la ciudad y de la pagoda de Yasaka, el hotel cuenta con una ubicación ideal junto al templo de Kodai-ji y cerca de muchos de los lugares de Kioto clasificados por la UNESCO como patrimonio de la humanidad, incluido el templo de Kiyomizu-dera. La propiedad comparte espacio con un jardín histórico. A través de unos escalones de este último, se llega a Kyoyamato, parte de un restaurante familiar que data de 1877 donde se sirve auténtica cocina kaiseki de temporada.
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